¡SIGUE ESTA RUTINA!
- Beba mucha agua: La hidratación es clave para una piel suave y radiante. Mantén una rutina de hidratación, ten siempre contigo una botella de agua o una cantimplora. ¡No te olvides de beber agua al despertarte!
- Evita el agua caliente: El agua caliente puede irritar la piel y despojarla de los aceites naturales que son esenciales para mantenerla sana
- ¡No te olvides de las manos! La piel de las manos y el cuidado de las uñas son fundamentales, ya que son estas zonas las que se encuentran más expuestas todos los días
- ‘Pat Dry’: seca el rostro con pequeños toquecitos y con toallas suaves, lo que implica un proceso mucho menos agresivo y favorecerás la aparición de la flacidez